Aislamiento
Después de un dia construyendo cocheras, subiendo escaleras con 36 kilos de azulejos, tejas,sobre mis hombros, después de un dia cocinando, cortando carne, preparando salsas mientras escuchaba podcasts sobre sectas y discutía con mi jefe sobre sectas muy extrañas, sectas con tácticas sutiles que te aisla de tus amigos, tu familia y tu razón, tácticas como al aislamiento y los insultos que te corroen la mente, te agotan y te convierten en su objetivo.
Después del trabajo, fui a ver a una mujer que yo había elegido entre otras dos con las que había tenido relaciones. Yo lo quería todo, y yo no me importaba si esas mujeres estaban con otras personas. Yo quería ser completamente libre. Pero las otras mujeres solo me querían a mí. Yo no estaba preparado para el comité.
Su casa era un edificio magnífico. Dentro ella había muchos objetos antiguos, muchas antigüedades. Libros viejos que desprendían un olor dulzón y ligeramente a humedad. Munecas de la época victoriana y, en algunos estantes: muñecas separadas de las demás. Cada muñeca parecía solitaria, con sus grandes ojos cansados. Cada estante estaba repleto de numerosas muñecas, agrupadas en determinados lugares.
Ella me condujo hasta el sofá donde nosotros estábamos sentados y ella me habló de la asociación a la que pertenecia. Durante mucho tiempo me he preguntado a qué organización pertenecían ella y sus amigos.
Ella me dijo: "Nosotros creemos que tú serás un buen miembro de la asociación, pero debes completar la formación de inducción."
"Ok." Yo respondí con interés.
"Primero llegarás a un edificio grande, y varias personas estarán separadas en una sala grande con muchas sillas y mesas."
"OK" Yo empecé a sentirme incomodo. Como cuando yo era un niño y mi hermano me distraía metiéndome un moco en la oreja. Con el tiempo, me di cuenta de que si lo hizo, lo que estaba haciendo; fue más tarde.
Ella siguió hablando, pero ella parecía insegura de lo que estas palabras. Parecía dudar sobre sus palabras. Era como si ella estuviera diciendo algo muy extraño: "La primera vez, me sentaba durante horas hasta que alguien me subía al escenario, y la gente que había permanecido en silencio empezaba a decir cosas horribles sobre mí. Sentía que me estaban metiendo, reclutando, a la fuerza en una pandilla."
Yo no recuerdo mucho después de esas palabras, pero yo recuerdo muy bien mi reacción.
Cuando ella terminó su relato, ella me habló del premio y me preguntó si yo estaba listo para unirse a la organización. Yo no sabía que ella lo considerara un 'argumento de venta' para la organización: Los insultos o pagar para ser insulto?
Yo le respondí como si ella me estuviera preguntando si ella podía arrancarme los ojos y pegarme los tristes ojos de la muñeca que tiene en su estante. Yo dije: "¡No! No gracias" como a un hombre al que le piden que haga algo horrible.
Ella no me presiono, no me obligo, para que me uniera a la organización, pero después de ese evento, me habló mucho menos de ello. Finalmente, ella dejó de comunicarse conmigo.
Yo me pregunté cuál era el nombre de esa organización.
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