Todas las cosas buenas de la humanidad

 

"¡Ellos nos encontraron!" 

Pero, ¿quiénes eran? 

Yo corrí con los extraterrestres mientras yo sangraba. Mi sangre se mezcló con la calle roja. Los extraterrestres se pusieron, convertidos, rojos. Los humanos se pusieron rojos. Y una voz se elevó dentro de nosotros. No entendí el mensaje pero yo lo sentí. 

Yo lo supe. 

Yo sabía algo. 

Fue una gran sabiduría primordial y antigua. 

Yo vi el agujero en mi estomago. 

Una fuga se convirtió en una cascada de sangre y yo vi todos los horrores que estaban sucediendo en la mente del humano. Las celebraciones en las plazas publicas bajo los cuerpos negros. Los niños con barrigas grandes como cuencos y piernas como palos que vuelven, regresan, en las casas sin techo. 

Entonces la sangre convirtió el agua en una cascada y yo vi todas las cosas buenas de la humanidad. El hombre negro pensado en su mujer y sus ninos. Las madres sostienen a sus niños con barrigas grandes como cuencos y piernas como palos antes de irse a dormir y ninguno de ellos se despiertan.